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lunes, 26 de noviembre de 2018

todo sucedió pronto, aunque han pasado36 años. nos acogió el frío, la nieve, el invierno y nuestra búsqueda de Libertad para los bolivianos no ha terminado. prosigue su búsqueda. Mauricio Aira

varias veces intenté abrir este sitio y escribir y no pude. ahora, por decir hoy lunes escribir sobre la oscuridad, el frio y el invierno y las penas que no faltan, la decision la tomé a las 4 de la tarde, ya caían las penumbras y me dije en una hora estaré descansado, y fueron dos horas de una siesta larga porque mi dia empezó a las 6.45 la oscuridad en medio en este tiempo de Adviento, lo cierto es que al sentarme en el escritorio y abrir mi blog, la noche había vencido. todo alrededor oscuro, las tenues lucecitas de navidad en el balcón de enfrente que también se apagaron y cubrieron de Negro todo el entorno.


mi ventana permanece iluminada, la única en todo el manzano y así hasta las tres, las cuatro de la madrugada, que no es ninguna madrugada sino la noche permanente continua, tan helada como solitaria y muda. todos los coches están parqueados, nada ni nadie circula ni camina, como una Ciudad abandonada y es que las noches de invierno como ésta con 5, 7 o más grados bajo cero se hicieron para fantasmas que ni siquiera se atreven a salir de los Bosques o de las Casas es tan duro el ambiente que ningún ser viviente perturba el espacio, las ratas a buen recaudo ni siquiera se atreven a salir fuera. se arriman unas a otras en una promiscuidad absoluta para protegerse del aire que produce la muerte sin calor interior.


todo esto, porqué? un dia, y dos, un año y otro mi prédica fue la misma. los graves problemas del hambre, la ignorancia, la pobreza y la enfermedad no se resuelven con el uso de las armas, ningún golpe de estado nos dará la solución que está en la unidad, en el trabajo, en utilizar las fuerzas colectivas para salir de la crisis sempiterna en que vive la Patria. no serán los fierros que saquen a Bolivia de la falta de alimento, que nos den los conocimientos para vivir mejor, o que permitan explotar los recursos naturalezas y disfrutar de su comercialización. no serán los uniformados que salven a Bolivia y produzcan riqueza.


mi discurso se repetía dia tras dia, el primero a las 7.15 am. Cuando desde los micrófonos de Radio Cosmos ofrecía mi saludo a los oyentes "nuestra palabra de hoy", editorial que venia escribiendo desde Radio Amauta de La Paz, desde Pio XII de Siglo XX, desde Centro y Nacional de Cochabamba y ahora desde Cosmos que se había ganado audiencia total. entre ellos los esbirros de García Meza que se aprestaba a tomar el poder…


Garcia Meza ya con tres estrellas de oro, comandante del Ejército llegó a Cochabamba y me mandó a llamar, adivinen con quién, con su primer colaborador Luis Arze Gómes. "mi General quiere hablar contigo" mientras yo leía las noticias, "no puedo tengo trabajo hasta las 8.15, "no importa, te espero aquí (en la redacción de Radio Cosmos) y te llevo donde mi General"


García Meza "tiene que Haber una forma de entendimiento" me espetó. no entendí entonces que me pedía una precio por mi silencio, por el cambio de actitud. No le pude entender, me devolvió a Radio Cosmos esta vez un soldado chofer en el mismo jeep militar. Poco tiempo después el golpe, el cierre de la Radio y de otras radios y de periódicos, estado de sitio, toque de queda, persecusión… aunque en mi caso pasaron semanas hasta febrero de 1981, ya detenido e incomunicado "te expulsan a Buenos Aires" me dijo Vicky Calderón encargada por Arze Gómes de entregarme el billete de avión. Nunca más volví a mi casa, nunca más a la Cosmos...y tuve que abandonar los micrófonos que me trataban con afecto y camaradería...de Buenos Aires a Gotemburgo…(6 meses de padecer, que está relatado en mi libro "Gotemburgo Destino Final) llegamos a Suecia en verano...florido, verde, de abundante sol y de agua marina templada, el frío llegó en octubre, en noviembre como ahora, y todo ello por predicar la Libertad, la Democracia, la Justicia, todavía no llegan a Bolivia, no como la soñamos un dia, no como la estamos deseando hoy en dia.