Si algo cuesta en la vida es despedirse de los sueños. Porque resulta que a uno le han enseñado de niño a soñar. Acariciar ilusones. Creer en promesas y a desear con ganas locas un futuro mejor. Es natural que así sea! Parece absolutamente propio de nuestra naturaleza humana.
Los hombres latinos tenemos especial vocación por los sueños. Nos encanta estar siempre pensando en el mañana, es parte de nuestro ser interior, y cuanto más planeamos y soñamos nos sentimos mejor. El tener ilusiones concretas y factibles unas veces, otras quimeras y hasta ilógicas, nos ayudan a vivir y por ello quizá nos aferramos a estos sueños con pasión, con fe, con ingenua ilusión. Esto ayuda a entender lo duro que resulta renunciar al sueño que uno ha concebido un día y que le acompañó unido a su mente y corazón durante corto o largo tiempo. Dar por terminada la ilusión saber que no podrá ser, que se trató de un sueño, de una ilusión, de algo quimérico, justo quizá y necesario, pero irrealizable. El renunciamiento se siente casi como una traición asímismo, como la muerte de una parte de nuestro propio yo.Esta disgresión viene a propósito del deseo que tengo de ir a estudiar a España un curso de postgrado. Hasta ahora he recibido tres negativas. Del sindicato de periodistas, que no existe un fondo para tales estudios de sus asociados, ni siquiera cuando lo presenté como parte del plan de mejoramiento profesional. De la Federación repitiendo argumentos del Sindicato y marcando que el apoyo que recibo parte en forma de salario está condicionado a que permanezca en Suecia, que si salgo a cualquier otro país, el apoyo no puede continuar. El Mercado de Trabajo repite lo mismo que tengo salario porque trabajo, que si estudio se termina el salario, lamenta la respuesta negativa, pero así contribuyen a que renuncie al sueño de hacer una tesis en Madrid, como parte de superación profesional. Confronto los hechos, pero no renuncio al ideal.
Nov. 1988 (Durante 1989 permanecí en Madrid asesorado por la Universidad Autónoma y pude completar la tesis sobre Desarrollo Social de los Medios de Comunicación)