Cómo explicar a los hijos que toda la poderosa energía que tienen siendo jóvenes y adolescentes física y espiritual debe ser encaminada hacia un fin determinado?
Que Dios nos da la ilusión del amor, el placer del acto sexual para crear seres nuevos (la reproducción de la especie) para mutua complacencia de dos personas que se aman entre sí, que hacen de su amor una escuela de comprensión y conocimiento mutuo, que los llevará con el tiempo a construir juntos un porvenir común!
Cómo hacerles entender que este es el Plan Divino del matrimonio, que así construído producirá los frutos de fidelidad, lealtad y amor que son cualidades verdaderamente cristianas?
Proceder de otra manera lleva a la traición, al hastío, la pérdida de la ilusión por la vida y trae aparejados el abandono, la soledad, la desesperación y muchas veces el crimen o el suicidio (Dicen los teólogos que el mayor pecado que puede cometer el hombre es dudar de la Misericordia divina, y el suicida peca contra Dios y contra sí mismo salvo que a última hora diga Perdón, Señor porque duré de tu Amor)
Son las doce de la noche! Ahora mismo veo a mis hijos mayores marcharse sólos con dos muchachas. Tendrán diversión y quizá placer por algunas horas, pero luego vendrá la desesperanza, el hartazgo que llenará sus existencias.
En estas condiciones, cuando considero mi incapacidad para hacerles reflexionar, sobretodo porque no encuentro las palabras precisas y me falta el apoyo y la comprensión de su madre, me pongo a temblar pensando en su futuro.
No conozco otra forma de educarles que ésta que a mí me enseñaron en la escuela. A partir de esta relación con las enamoradas viene el sentido de responsabilidad que debo inculcarles como lo más preciado de la vida.
Primero de enero de 1985
Ponemos a disposición de todas las personas de buena voluntad, que utilizando un lenguaje claro y pulcro, deseén participar con opiniones en el blog. El espacio está abierto a todos, es más agradeceremos toda participación que vaya a enriquecer los contenidos en provecho colectivo
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jueves, 15 de marzo de 2007
miércoles, 14 de marzo de 2007
Un otro primero de enero (1985)
Hemos llegado a un nuevo uno de enero. 81, 82, 83 y 84, cuatro navidades, cuatro año nuevos que pasamos en Suecia, el primero fue en Ronneby, Blekinge y nuestro fallido viaje a Estocolmo, luego en Gotemburgo uno y otro primer día del año, pobremente sin contar nada más que con lo estrictamente necesario. Nada falta es verdad, pero tampoco sobra.
No hay dinero para ir todos juntos a un restaurante, a una función de teatro, ni siquiera a un cine. Cuando pienso que en la Patria bastaba por ejemplo a ponerme a trabajar un par de semanas para tener un dinero extra y poder hacer una fiesta, reunir a los amigos y brindar y comer. Aquí todo ello está prohibido. Si uno se excede en un gasto, luego vienen los días de hambre y de ayuno. Esto es irreversible. La sobriedad extrema a la que no estamos habituados, esa visión de la vida de estar ahorrando siempre, calculándolo todo,limitándose en todo sin darse el gusto de una expansión, ni en el vestir, ni en regalar, nos restringe tanto, que nos hace odiar esta vida!
Hoy fuimos invitados a casa de una viuda, cuyo esposo murió asesinado en Yemen del Sur. Ella es hoy una refugiada política y vive con su único hijo de 10 años. La cena fue preparada por ella misma, inobjetable. Postre, chocolates, un buen café, por bebida una cerveza "lät" de reducido grado alcohólico. En Bolivia en la casa más humilde habría sobre la mesa sin duda vino, wisky y quizá champagne y coñac, pero también abrazos efusivos, bailes y canciones.
El Año Nuevo transcurre sin emociones. Los hijos se marchan de casa en busca de sus amiguitos, es natural que quieran divertirse están en la plenitud de la vida. Las muchachas que los frecuentan encuentran en ello jóvenes diferentes que cantan, que bailan, que conversan. Son más soñadores y espirituales, las suecas los ven entretenidos, pero saben que esa amistad con los latinos es sólo pasajera!
No hay dinero para ir todos juntos a un restaurante, a una función de teatro, ni siquiera a un cine. Cuando pienso que en la Patria bastaba por ejemplo a ponerme a trabajar un par de semanas para tener un dinero extra y poder hacer una fiesta, reunir a los amigos y brindar y comer. Aquí todo ello está prohibido. Si uno se excede en un gasto, luego vienen los días de hambre y de ayuno. Esto es irreversible. La sobriedad extrema a la que no estamos habituados, esa visión de la vida de estar ahorrando siempre, calculándolo todo,limitándose en todo sin darse el gusto de una expansión, ni en el vestir, ni en regalar, nos restringe tanto, que nos hace odiar esta vida!
Hoy fuimos invitados a casa de una viuda, cuyo esposo murió asesinado en Yemen del Sur. Ella es hoy una refugiada política y vive con su único hijo de 10 años. La cena fue preparada por ella misma, inobjetable. Postre, chocolates, un buen café, por bebida una cerveza "lät" de reducido grado alcohólico. En Bolivia en la casa más humilde habría sobre la mesa sin duda vino, wisky y quizá champagne y coñac, pero también abrazos efusivos, bailes y canciones.
El Año Nuevo transcurre sin emociones. Los hijos se marchan de casa en busca de sus amiguitos, es natural que quieran divertirse están en la plenitud de la vida. Las muchachas que los frecuentan encuentran en ello jóvenes diferentes que cantan, que bailan, que conversan. Son más soñadores y espirituales, las suecas los ven entretenidos, pero saben que esa amistad con los latinos es sólo pasajera!
Imágenes de la Suecia desconocida!
"Tú eres un muchacho amable", una buena persona me dice el hombre cuando le invito a tomar asiento frente a mí, en el desvencijado recibidor de este horrible hotel donde vivo circunstancialmente en Estocolmo mientras dure mi curso de Cooperativismo.
Es un hombre de 60 años envejecido prematuramente. Terriblemente obeso, el cabello y la ropa sin lavar, con un olor a orines tan fuerte que aleja a todos cuantos se acercan. Todos huyen de él, procuran mantenerse a distancia, por ello mismo se sorprende tanto de alguien que le dirija amablemente la palabra, que luego de preguntarme si soy sueco, por mi modo de hablar el idioma escandinavo, me conversa un poco de manera incoherente, se pone a llorar, casi sin fuerzas, sin tener voluntad de llorar, intenta invitarme un cigarrillo, me dice que está solo, tremendamente solo!...y llora mas y me pregunta si yo creo en Dios, al responderle afirmativamente me dice que él no cree en Dios, porque Dios no ha venido donde él, se queda de dolor, de soledad, de impotencia, no deja de soplar, se va sin despedirse. Me deja con una indisimulada impresión de abandono y soledad!
17 de diciembre de 1984
Es un hombre de 60 años envejecido prematuramente. Terriblemente obeso, el cabello y la ropa sin lavar, con un olor a orines tan fuerte que aleja a todos cuantos se acercan. Todos huyen de él, procuran mantenerse a distancia, por ello mismo se sorprende tanto de alguien que le dirija amablemente la palabra, que luego de preguntarme si soy sueco, por mi modo de hablar el idioma escandinavo, me conversa un poco de manera incoherente, se pone a llorar, casi sin fuerzas, sin tener voluntad de llorar, intenta invitarme un cigarrillo, me dice que está solo, tremendamente solo!...y llora mas y me pregunta si yo creo en Dios, al responderle afirmativamente me dice que él no cree en Dios, porque Dios no ha venido donde él, se queda de dolor, de soledad, de impotencia, no deja de soplar, se va sin despedirse. Me deja con una indisimulada impresión de abandono y soledad!
17 de diciembre de 1984
lunes, 12 de marzo de 2007
El socialismo es movimiento de libertad
"El socialismo es básicamente y ante todo un movimiento de libertad, donde tienen vigencia tanto la protección de derechos humanos, como el desarrollo de la democracia. El socialismo da a las personas la oportunidad de liberarse de la dictadura en situación extremas como ser la desocupación, la inseguridad, la pobreza", así definió Olof Palme en la inauguración del Congreso Socialdemócrata, su concepto de socialismo, dijo también que socialismo es equidad entre las personas, un sentido de justicia, y la posibilidad de influír en la sociedad, sin centros de poder privados ya las órdenes de la solidaridad internacional.
Y estos otros conceptos que sin duda nos identifican. El socialismo es algo que se organiza contra el poder del oro que oprime. Socialismo es un concepto que rescata la necesidad de comunión y de solidaridad que existe entre los seres humanos.
El socialismo es un estado que ubica a los intereses comunicarios por encima de todo, desechando la competencia desleal y agresiva.
Así conceptuado no hay cristiano que no sea socialista al menos en potencia. Yo mismo me sumo a este concepto que humaniza, justifica, da pie pleno a la lucha política. El socialismo busca el uso del poder político y económico para provecho del hombre, y aquí no hay diferencia absoluta con el concepto del humanismo cristiano. No va más allá de como lo veo. Los propios marxistas que no rechazan a Dios, que no cuestionan la fe, ni los valores religiosos, luchan por un sentido de justicia que no contradice nuestra forma de ser y de pensar. La Biblia en el Apocalipsis deja entender que habrá la unión entre todos aquellos que tienen hambre y ser de justicia, aún cuando no estén oficialmente unidos en la fé.
22 de septiembre 1984
Y estos otros conceptos que sin duda nos identifican. El socialismo es algo que se organiza contra el poder del oro que oprime. Socialismo es un concepto que rescata la necesidad de comunión y de solidaridad que existe entre los seres humanos.
El socialismo es un estado que ubica a los intereses comunicarios por encima de todo, desechando la competencia desleal y agresiva.
Así conceptuado no hay cristiano que no sea socialista al menos en potencia. Yo mismo me sumo a este concepto que humaniza, justifica, da pie pleno a la lucha política. El socialismo busca el uso del poder político y económico para provecho del hombre, y aquí no hay diferencia absoluta con el concepto del humanismo cristiano. No va más allá de como lo veo. Los propios marxistas que no rechazan a Dios, que no cuestionan la fe, ni los valores religiosos, luchan por un sentido de justicia que no contradice nuestra forma de ser y de pensar. La Biblia en el Apocalipsis deja entender que habrá la unión entre todos aquellos que tienen hambre y ser de justicia, aún cuando no estén oficialmente unidos en la fé.
22 de septiembre 1984
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