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viernes, 30 de marzo de 2018

De pronto Cochabamba se convirtió en mi nuevo hogar. 3 anos en Radio Nacional como Director y un año más en el Lloyd Aéreo Bolivia como primer Jefe de Relaciones Públicas. estaba entonces en la promoción de la Gran Empresa Aérea

ya en Cochabamba mi hija Charito y su madre reclamaron mi presencia, y aprovechando un feríado decidí ausentarme de La Paz, a la llajta. se me ocurrió visitar a Victor Aguilar Dorado, entonces secretario de Prensa de la Presidencia con oficinas en calle Ayacucho cerca de la Federación de Trabajadores de Radio donde yo atendía, como Secretario Permanente.

Hola Victor, estoy planeando viaje a Cochabamba, crees que puedo ser útil? Victor no tardó en reaccionar, "sí. quisiera que ayudes un poco a mis socios de Radio Cosmos, espera un poco que te hago un memo" (se refería a unas líneas como Ayuda memoria) Hugo Maldonado, Director de Radio Centro. Estimado Hugo. nuestro colega común Mauricio Aira estará algún tiempo en Cochabamba donde ya viven su esposa e hija. sus conocimientos en materia radial son valiosos y estoy seguro que su presencia en Centro, será de utilidad. Un abrazo. Victor Aguilar Dorado".

Hugo leyó el memo, y al parecer había conversado con Victor por teléfono. "Bienvenido a la llajta. Será útil su colaboración entre nosotros de modo que puede ya usted empezar...cuándo? -hoy mismo de ser posible repetí- y me extendió un Memo, nombrándome "Director de Programas de Radio Centro". Horas después ya había conocido a la mitad del personal y Maldonado me asignó un escritorio en su proximidad donde me pusieron una máquina de escribir. Manos a la obra, empezé revisando la programación, que casi no existía. Radio Centro en pocos meses de existencia se había ganado la simpatía del público y el equipo compacto de colaboradores de Hugo que consistía en José Oropeza de los Llanos (Pilincho), Héctor Mejía (Jefe de Prensa) Milivoy Eterovic, Ramiro Méndez, Carlos Dalence (Jefe de deportes) Antonio Torrico (cuñado de Carlos y recomendado suyo) se encargó de la economía desde un comienzo y con tal éxito que llevó a la emisora hasta la cresta superior de la audiencia, por tanto del avisaje.

Feliz con mi nueva tarea, Cuando de pronto recibí una llamada que el Gerente de Radio Nacional, Sr. López deseaba una entrevista personal.. quién llamó era Elsita Loredo (potosina y entonces secretaria de la emisora propiedad de los trabajadores del Lloyd Aéreo Boliviano) Elsa acompañó al señor López (contable en la administración del LAB) y salimos de Centro en busca de una cafetería: "Deseamos que se haga cargo de Radio Nacional" así claro y directo. me sorprendió totalmente. Desde luego, casa y comida ya tenía en casa de mis suegros, los padres de Forty mi esposa, por el momento no tenía problema, luego era mejor ser director que un simple empleado, aún Cuando los colegas de Radio Centro me llegaron a estimar y se sintieron muy contentos porque en los festejos de Agosto pude "relatar los desfiles" y al parecer todos contentos según publicaciones de los medios, entonces "El Mundo" y "Prensa Libre" Los Tiempos todavía no salió a luz en su segunda época.

Segundo encuentro por la manana, "debe tener usted algún notario Amigo para redactar el contrato" y acudimos a Ramiro Villarroel, en pocos minutos el texto estuvo preparado y conformes las partes, Administración de Radio Nacional y Mauricio Aira. se firmó y al dia siguiente me presentaron al personal y me dieron un escritorio. Claro que las condiciones físicas eran paupérrimas, dos habitaciones ésta (mi oficina) tres escritorio, la secretaria, el Director y el Contador Sr. Rodríguez con muchos años funcionario del LAB. Prensa funcionaba en la esquina de un galpón donde estaban las casetas de "locución y operación" y un espacio bastante grande para los "programas en vivo", en medio había un gran patio con vegetación con cultivas y al otro extremo, la clínica del LAB, donde atendían los médicos al personal de empleados y trabajadores del LAB.

El contrato se pactó para dos años obligatorios y un año más "voluntario" que se acordaría entre partes y la remuneración fija de Un Mil Ochocientos Bolivianos y el 10% de toda publicidad nueva a partir de 15 mil bolivianos, algo así ya no recuerdo exactamente refrendada por la Federación LAB, lo que me garantizaba su cumplimiento. En estas condiciones, me puse a trabajar con todo entusiasmo. Pasaron los dos años y me renovaron el convenio por un tercer periódico, que al cumplirse me retiré de la Emisora y empezé mi trabajo como Jefe de Relaciones Públicas del Lloyd Aéreo Boliviano y esa es otra historia. El relato se me ocurrió de pronto Cuando pensé que en Cochabamba por determinación de la Providencia, permanecí 15 años. en este suelo bendito, nacieron 5 de mis 6 bástagos. Todos me han dado grandes satisfacciones hasta ahora y 12 nietos. una bendición.

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